Prehistoria e Historia Antigua en Poza
Tanto la sal como la ofita fueron dos elementos, ya desde periodos muy tempranos, lo suficientemente importantes como para propiciar un asentamiento humano continuado.
Durante el Neolítico, alrededor del año 3.000 antes de Cristo, existieron núcleos de poblamiento en La Bureba y el Páramo de Masa. Seguramente fueron aquellos antiguos pobladores quienes descubrieron el método para fabricar sal, para obtenerla a partir del agua salada, de la salmuera.
Hasta entonces el hombre había recogido la sal que quedaba cristalizada en los espumeros, los manantiales naturales de agua salada, y había experimentado que la sal era un excelente complemento de la alimentación, le permitía conservar alimentos, curtir las pieles…
En la prospección realizada en Poza en 1999 no fueron localizados yacimientos paleolíticos aunque sí se detectaron restos de posible adscripción neolítica y calcolítica (Aratikos – JCyL). El registro arqueológico obtenido en la excavación realizada en el castillo en el año 2006 como intervención previa al Proyecto de Restauración del castillo de la Fundación de Patrimonio Histórico de Castilla y León (Aratikos) aportó una compleja y prolongada secuencia de ocupación en este sector que se inicia en el Bronce Medio, permitiendo confirmar la presencia más o menos estable de comunidades de individuos con una cronología anterior a la que hasta ahora se había a constatado (Hierro II en El Castellar y el Alto Milagro). Puede acceder al informe técnico de la excavación en la página web de Aratikos.
Hacia el año 350 a. C. y aproximadamente a 2 kilómetros del actual emplazamiento de la villa existió Salionca o Salionica, ubicada en el Alto Milagro. 
Urna oikomorfa - Museo de BurgosEste núcleo de población, habitado por autrigones, se convertirá en la FlaviaAugusta romana a partir del siglo I d. C. entre cuyos vestigios de tipo constructivo destacan algunos tramos de calzada romana y restos del acueducto que llevaba agua a la ciudad. Además han podido ser recuperados algunos de los singulares monumentos funerarios de la necrópolis, de cronología romana aunque de tradición indígena, conocidos como urnas oikomorfas.
Con toda seguridad en esta época de dominación romana se produjo un impulso significativo en la explotación de las salinas, y se introdujeron nuevos métodos de obtención y extracción de salmuera que han condicionado el trabajo en el Salero durante los dos últimos milenios y han definido la singularidad de estas salinas en la península.